Más de 78 millones de personas sufrirán enfermedades neurodegenerativas
Enfermedades neurodegenerativas pueden llevar a los abuelos a la pérdida de funciones básicas como levantarse de la cama y caminar según exponen expertos del Centro de Atención Integral del Adulto Mayor Hogar La Ponderosa
La incidencia de las enfermedades degenerativas en los adultos mayores aumenta progresivamente en los países de Latinoamérica y Venezuela no escapa a esta realidad.
Según las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), para el año 2021 más de 55 millones de personas (el 8,1 % de las mujeres y el 5,4 % de los hombres mayores de 65 años) viven con algún tipo de enfermedad neurodegenerativa y la previsión es que, en el caso del Alzheimer, para el 2030 sean 78 millones de personas con estas condiciones y 139 millones para 2050.
Estos datos son preocupan al sector médico y han obligado a una reflexión por parte de las administraciones y de los agentes sociales. En este sentido, ante la creciente necesidad que se proyecta, instituciones como el Centro Integral de Atención al Adulto Mayor Hogar La Ponderosa, ubicado en Caracas, se adelantan para plantear opciones. En el Hogar La Ponderosa han reorganizado sus servicios para incluir el programa Day Care, el cual busca ofrecer una vida de calidad a las personas afectadas y a sus familias durante las horas de estadía que necesiten permanecer bajo cuidados especializados.
Los trastornos neurocognitivos no solo roban a millones de personas sus recuerdos, su independencia y su dignidad, sino que también afectan su salud física y reduce de manera significativa la habilidad de los individuos para realizar las actividades cotidianas.
El Programa Day Care
Maria Edith Anselmi, directora del Hogar La Ponderosa, explicó que el programa Day Care, mediante el cual atienden de lunes a viernes, entre 9am y 5pm, a los adultos mayores con problemas neurocognitivos, ha sido pensado en esas necesidades de atención.
“Buscamos beneficios en varios sentidos para la familia, sobretodo el cuidador familiar, que podrá contar con el tiempo valioso para hacer sus propias actividades, diligencias pendientes, reunirse con amigos, conservar su trabajo y vida social, incluso cuidar su aspecto físico, el cual en la mayoría de los casos abandona por atender al adulto mayor”.
De igual forma el Day Care, permite al anciano, durante sus horas de cuidado en el centro, disponer de fisioterapia y rehabilitación cognitiva y ocupacional.
“Aplicamos un plan de atención que incluye actividades recreativas que ayudan al abuelo en la estimulación. Aunque no se logra evitar el avance de la enfermedad, su desarrollo es mucho más lento”, según refiere Anselmi.
Este tiempo permite que entre las personas con trastornos como el Alzheimer, se fomente la interacción social con sus pares en edad, lo cual no es posible en casa. “Organizamos paseos que les ayudan con sus recuerdos o en la alegría de salir un rato a la calle y ver personas diferentes”, destacó la directora del centro.
Rescatando la memoria muscular
Por su parte Alexis Morillo, fisioterapeuta del Hogar La Ponderosa, con más de 16 años especializado en realizar terapias al adulto mayor, destaca que un aspecto muy importante que es descuidado, sin querer por la familia, es la salud física del abuelo.
“Cuando reciben un diagnóstico como el Alzheimer se concentran en su situación cognitiva y comienza a darse un deterioro en su memoria muscular porque la familia evita molestarlos ante sus respuesta y allí comienza el problema”.
Explica que normalmente el estado físico del paciente está bien al momento de diagnosticar la enfermedad, pero al tener pérdida de la actividad funcional empiezan las limitaciones.
“El adulto mayor con problemas de trastorno neurocognitivo comienza a olvidar actividades tan básicas como levantarse de la cama o caminar. Pasan mucho tiempo sentados y pierden su elasticidad cayendo entonces en silla de ruedas”, apuntó Morillo.
En el Day Care las actividades fisioterapéuticas buscan activar esa memoria muscular según expone el experto. “Su memoria va a seguir degenerándose, pero podemos evitar mayor deterioro de su cuerpo. En el Hogar los ejercitamos para que se paren, se sienten, caminen, que no tengan miedo, que logren equilibrio, que activen sus brazos, es decir, que se reactive su memoria muscular perdida”.
Culminó destacando que en algunos casos, el adulto mayor presenta hinchazón de tobillos, sufre lesiones, escoliosis, dolores lumbares y estas afecciones se relacionan con el sedentarismo que viven en casa, debido a que no cuentan con personal calificado para hacer las terapias que le pueden dar una mejor calidad de vida, “de allí que el programa Day Care sea una excelente opción para todos”.